No habrá nunca una puerta. Estás dentro
y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
tenga fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
de interminable piedra entretejida.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
en el negro crepúsculo la fiera.
Borges
martes, 1 de septiembre de 2009
tictac
siempre que estás apurada por estar en algun lugar, y tenés que salir URGENTE de tu casa - no encontrás las llaves - el ascensor no llega - perdés el ómnibus
No hay comentarios:
Publicar un comentario